5 razones con las que convencí a mi papá para que se vacune contra la influenza
Cuando me enteré que el Ministerio de Salud (Minsa) emitió una alerta epidemiológica ante el registro de casos de influenza A (H3N2), en quien primero pensé fue en mi papá. A sus 70 años, formaba parte de la población vulnerable ante esta enfermedad y me preocupaba que pueda contraerla. Además, tenía inquietud sobre cómo reaccionaría ante la noticia que debía vacunarse nuevamente.
El cumplió, al pie de la letra, con ponerse las tres dosis de la vacuna contra el COVID-19 y está dispuesto a recibir la cuarta dosis. Después de mucho miedo e incertidumbre, mostraba su carnet de vacunación no solo como un papel con firmas y sellos, sino como un símbolo de la tranquilidad. Por esa razón, ahora no quería preocuparlo con lo de la influenza, pero no había otra salida que decirle la verdad, por su bien y por el de toda la familia.
Volví a usar la misma estrategia para convencerlo de inmunizarse contra la influenza:mostrarle la importancia de la vacuna. Mi papá nunca fue una persona obstinada: si le demostraba los beneficios de tomar una decisión, sobre todo en cuanto a salud, él cedía sin chistar.
Por eso, tenía que informarme muy bien y organizar los datos para explicarle con claridad y más detalle. Me tomé toda una tarde para esta tarea. Recurrí a fuentes oficiales y de prestigio que puedan convencerlo. En el siguiente gráfico, dejo los puntos que le expuse a mi papá:
Después de explicarle para qué sirve la vacuna de la influenza, noté que entendió y se mostró predispuesto a inmunizarse. Además, con preocupación, me preguntó qué otra acción podía seguir para evitar la enfermedad. Le conté que, de acuerdo con el Minsa, las medidas de prevención que sirvieron contra el COVID-19 también son aplicables contra la influenza. Es decir, usar mascarilla, mantener el distanciamiento social y lavarse las manos con agua y jabón al menos durante 20 segundos.
Incluso, ahora que la mascarilla es opcional en lugares abiertos o con poca afluencia de personas, él dice que seguirá usándola para proteger su salud. Esta decisión me hace sentir más tranquilo, pues comprendo que está más consciente de su bienestar. Pero si llega a contagiarse de la influenza, sé que contará con el respaldo de su Seguro de Salud de Pacífico.
Además, gracias al beneficio del Programa de Vacunación, mi papá puede acceder a la vacuna contra influenza trivalente (3 cepas) de forma gratuita (en determinados centros de vacunación) al ser asegurado de Pacífico. Pero también tiene la posibilidad de recibir la vacuna contra influenza tetravalente (4 cepas) a un costo especial. Aquí más detalle sobre los locales donde los asegurados encontrarán tarifas preferenciales:
Me preguntó cuándo le correspondía la primera dosis de la vacuna contra la influenza a mi hijo de 5 meses y le respondí que, de acuerdo con su cartilla de vacunación, será el próximo mes. Como es habitual, está muy pendiente de su nieto, y repite que hay que cuidarlo mucho para que no se enferme. Apenas inició la pandemia del COVID-19, se mostró muy preocupado por él y me insistía que no lo exponga. Tras la alerta epidemiológica del Minsa y mi explicación sobre el peligro de la influenza, ahora me exige que refuerce la prevención con mi engreído.
Mañana irá a recibir la vacuna contra la influenza y me pidió que lo recoja temprano. Por supuesto, acepté y le recalqué que se mantenga tranquilo, ya que tiene un poco de temor a las agujas. Seguramente, como lo hizo después de cada vacuna contra el COVID-19, dirá que no fue nada y que solo pensó en 3 cosas cuando sintió el pinchazo: en su bienestar, en su deseo de seguir acompañándome y en ver crecer a mi hijo todos los años posibles.
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