Recomendaciones para mantenerte seguro, fresco y cómodo al protegerte del COVID-19 con la mascarilla durante la temporada de calor.



¿Cómo resistir la mascarilla en verano?



Aunque al comienzo de la pandemia el uso de mascarilla nos parecía extraño por la novedad, hoy la usamos como una prenda de vestir más y nos sentimos protegidos frente al COVID-19 gracias a ella. Pero ahora es posible que durante el verano sea un poco incómodo llevarla cuando salgamos de casa, por lo que debemos tomar ciertas precauciones para resistir el calor con la mascarilla.



El uso obligatorio de la mascarilla y las altas temperaturas no es la combinación más apetecible en esta época del año, pero sí la más responsable y necesaria para proteger nuestra salud y la de los que nos rodean. Más aún en estos momentos en que los contagios de COVID-19 están volviendo a subir y hay reportes de nuevas variantes del virus.



La llegada del verano aumenta el nivel de incomodidad, ya que la mascarilla atrapa el sudor y el calor. Por suerte, hay modos de no sufrir tanto el calor al llevarla puesta. Debido a la obligatoriedad del uso de las mascarillas en espacios públicos, te proponemos algunos consejos:




Una información importante a tomar en cuenta es la aparición de acné en la zona que cubre la mascarilla. Se le conoce como maskné y brota por la fricción de la tela contra la piel. Pero no es nada nuevo: es común entre médicos y deportistas. Eso sí: el calor y el sudor pueden contribuir a que aparezca el maskné, advierte Mar Mira, especialista española en estética y nutrición.



Recuerda que cualquier producto que te apliques bajo la mascarilla debe ser de rápida absorción. De lo contrario, obstruirá los poros y así retendrás más fácilmente el sudor, propiciando la aparición de bacterias y acné. Además, resulta necesario lavar las mascarillas reusables y limpiar la piel a menudo. Si aun así presentas acné, piel irritada o una alergia, acude rápidamente a un dermatólogo.



De ahí la importancia de que, ante cualquier necesidad médica, cuentes con un Seguro de Salud (Integral). Luego de un periodo de carencia de 30 días, con este seguro accederás a consultas médicas, atención de emergencia, hospitalización, atención por maternidad, médicos a domicilio, entre otras coberturas.  De igual forma, dispondrás de una amplia red de clínicas para atenderte. Y, en casos de coronavirus, tendrás asegurado los medicamentos para aliviar los síntomas y la hospitalización si es necesaria.



En esta temporada de verano, protégete del sol y del COVID-19 al mismo tiempo. Evita quitarte la mascarilla y continúa aplicando las medidas de prevención, como lavarte las manos con jabón, echarte alcohol en gel y mantener el distanciamiento físico. Disfruta del verano con responsabilidad.



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